Estrategia de crecimiento potencial a largo plazo
Parte de comenzar una empresa propia, es planificar estrategias que te ayuden a crecer, ya sea de forma económica, expandir tus sucursales o simplemente agrandar tu negocio y poder dar más empleos.
Para lograr esos objetivos es importante que tengas estructurada una estrategia de crecimiento a largo plazo, pero si aún no descifras por dónde empezar este plan de crecimiento, aquí te damos algunos consejos que te pueden ayudar.
Conoce tu marca y a tus clientes.
Antes de realizar cualquier tipo de acción o plan es importante que conozcas tu compañía, y no hablamos que sepas que es lo que hacen, sino, el porqué lo hacen, porqué comenzaron sus operación y cuál fue su motivación.
Con eso en claro, será mucho más fácil crear una comunicación, de manera interna como externa, de tu producto o servicio; tus empleados se podrán sentir identificados y descubrir a tu cliente potencial será más sencillo.
Ya que tocamos ese tema, también es esencial que especifiques la características de tu cliente potencial, porqué medios lo puedes encontrar, cuál es su problema y/o necesidad y de qué manera se comunica.
Define tus objetivos.
Debes plantear metas a:
- Corto plazo: aquellas que se puedan cumplir dentro de un mes hasta 3 meses
- Mediano plazo: objetivos que se puedan desarrollarse durante todo un año
- Largo plazo: la manera en que visualizan a la empresa en un mínimo de 5 años.
Estos objetivos deben ser muy específicos y combatir una área de oportunidad: crecer económicamente, el número de colaboradores, oficinas, etc.
Y de preferencia establece metas que sean medibles, por ejemplo: ¿Qué porcentaje de ventas se debe lograr?
Investiga.
Después de determinar tus metas, deberás realizar una investigación para establecer tu plan de acción. Puedes observar las actividades de tu competencia, las tendencias de tu mercado o asesorarte con un experto para descubrir qué es lo ideal para ti.
Determina tus recursos
Cuando tu plan de acción esté listo, analiza si tus recursos son necesarios para llegar a las metas establecidas. Debes tener en cuenta tus recursos económicos, tecnológicos y de capital humano.
Mide tus avances
Siempre es importante realizar una evaluación para conocer si el plan está funcionando o si es necesario realizar cambios.
Puedes fijar una fecha mensual, trimestral o de acuerdo a tu forma de trabajar.
